Alberto Cortez

Cuando nació Julieta, mi hija, la primera nieta de mi papá, su emoción fue tan grande que le escribió a sus amigos para contarles la buena nueva, entre ellos a Alberto Cortez que 7 días después del nacimiento de July respondió un correo de mi viejo con estas palabras:

JULIETA

Carta a un niño recién nacido

Viene viajando JULIETA por los asombros,

estrenando la vida silencio y ruido,

un corazón flamante entre los hombros

y unos ojos que apenas se han encendido

JULIETA es un niña recién llegado

consecuencia de un acto de amor profundo

dos espermas astrales han conspirado

para darte la vida y traerte al mundo.

Te doy la bienvenida desde el futuro

Yo soy lo que tu eres ya transcurrido

te diré un par de cosas porque seguro

llegas completamente desprevenido.

No es un lecho de rosas ni es un infierno;

digamos un compendio de diferencias.

Puedes alzar la voz de un mejor intento

o vivir en silencio tu propia ausencia.

Has de saber que hay cosas incomprensibles;

Sin libertad la vida no vale nada,

se combaten por ella los imposibles

para vivirla luego condicionada.

¿Es absurdo verdad? contradictorio.

Es como si a la luz que nos ilumina

quisiéramos cambiarle su sol de oro

por la luz mortecina de una bombilla.

Emanan en el nombre de la justicia

los valores más ámplios, más eminentes.

Lo tribal sin embargo es lo que propicia

la condena al que quiere ser diferente.

Deberían las leyes ser desarmadas,

dictadas con respeto hacia el individuo,

sin que asome la sombra de una venganza,

mirando a las estrellas, no a los residuos.

No importa de quien sean esos trigales

que verás a la vera de los caminos.

Lo importante es que todos se vuelvan panes

aunque sea en la mesa de tu enemigo.

Es la astucia escalera hacia las alturas

y hasta puedes con ella llegar al cielo

más si al vértigo temes, mejor no subas,

y súmate al rebaño de los consuelos.

un día estoy seguro será ese día

que converjan en ti todos los “ismos”

y al tener que elegir ya en la porfía

ojalá que te alcance con ser tu mismo.

y otro día cualquiera, sin darte cuenta

quedarás prisionero de una mirada

sentirás como el mundo se te da vuelta

y que tienes el alma desorientada.

No cedas al agobio, ábrela entera

que se airee en el aire de los amores

que florezca en su seno la primavera

para que sus aromas sean los mejores

En fin querida Juli cualquier esquina

es buena para comernos una manzana

mientras siga la vida dando propinas

es igual si lo hacemos hoy o mañana

Con un entrañable abrazo.

Alberto Cortez

Que en paz descanses Alberto querido, gracias por todo lo que sembraste en nuestros corazones, en nuestras almas, en nuestro ADN.

Alejandro Flores

4 de Abril de 2019