Hola, aquí estoy.
Escribiendo, algo que últimamente hago poco, menos de lo que debería, no por
representar un deber, por ser una necesidad de descarga, de desahogo, y la
verdad es que necesito descargarme, necesito desahogarme. Últimamente ocupo mi
espacio haciendo otras cosas, pero no está, que tanto bien me hace, y que a lo
mejor representa una compañía necesaria para otras personas.
Es por eso que
nunca quise dejar de compartir los recuerdos de facebook o alguna que otra cosa
que escribo mientras veo como se resuelve la incertidumbre laboral que
atravieso, ya que al igual que la mayor parte de la población mundial, la
pandemia me afecta. En este proceso de ver como sigue mi trabajo terrenal,
descuidé mi labor espiritual, el espacio que pongo en marcha cada vez que dejo
que mis energías fluyan en forma de palabras. Hoy, Vivian, una persona a quien
no conozco personalmente, pero con quien espiritualmente llevamos algunas calles
de vida caminadas, me mostró un camino que hace tiempo quiero transitar y que
por un motivo u otro vengo postergando, es por eso que aquí estoy, para
proponerles que nos encontremos próximamente bajo otro formato y compartir lo
que nos pasa, lo que estamos viviendo desde el lugar que nos toca para que de de
ese modo nos podamos acompañar. La idea es que hagamos una charla por Zoom, básicamente
eso, acompañarnos, conocernos mejor, hablar de lo que nos pasa y ver cómo nos
podemos apoyar mutuamente. Quienes estén interesados me pueden escribir por
mensaje privado, pronto comunicare día y hora de ese encuentro, hasta tanto sepan
que estoy, sepan que estamos, y sepan que lo que pasa nos pasa a todos, por lo
tanto juntos podremos salir adelante.
Gracias por
estar.
Ale Flores
11 de Junio de 2020
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