Conozco la angustia de estar lejos estando cerca.
Conozco la soledad, la más profunda soledad que es la que se siente estando rodeado de gente.
Conozco el miedo de estar frente a la muerte.
Conozco el dolor físico.
El cansancio extremo.
Se lo que es tener sed y hambre.
Se cómo se siente no tener dinero.
Transite la incertidumbre.
Tuve que hacer duelos.
Tuve que superar pérdidas.
Ya no les temo a esos sentimientos porque los conozco.
Ya no les temo porqué los se pasajeros.
Llegamos solos y solos nos vamos. En el momento del último respiro somos nosotros ante la fragilidad de la vida.
La vida me dio fortaleza por medio de las experiencias, y Dios me dio la posibilidad de describir sentimientos que no caben en palabras.
Hoy los suelto, hoy les doy alas para que se los lleve el viento.
Parte de ellos quedarán siempre en mi, pero no son míos. Mi ser llegó puro y se irá puro, se llevará el crecimiento aprendido por medio de lo padecido, y de lo amado.
Ale Flores
10 de enero de 2025
La Merecida
Comedor