Vinimos a la tierra y aprendimos
a creer.
Creer que el agua es agua, que
el alimento es alimento. Que el bien es bien, y que el mal es mal.
Después crecimos y el Reiki nos
enseño que todo es energía.
La metafísica nos dijo que todo
es mente.
Y el Kybalion nos dijo que
podemos crear, que el mundo es lo que creamos y que nuestros pensamientos crean
la realidad.
Ahora, desde este punto de
contemplación vemos que el agua es energía, y si la creemos sanadora, nos
sanará.
Recordemos que eso que llamamos
casualidad es magia que aún no aceptamos o que no podemos comprender.
“Cuando el hombre perdió
contacto con la magia la llamo casualidad”, nos dijo Jose Luis
Parise guiándonos a crear la casualidad a través de “Casualizar, los Once pasos
de la magia”.
Aquí estamos, frente a las
pastillas roja y azul.
Una nos propone que olvidemos
todo y vivamos como antes, cuando creíamos en las casualidades, en que no
podíamos cambiar nuestro destino, en que la vida es sufrimiento y sacrificio.
O creer que todo es energía y
que con nuestros pensamientos podemos crear el mundo en el que soñamos vivir.
Las vibraciones que irradia la
mente son las que proyectan lo que recibimos.
Si cerramos los ojos y soltamos
los pensamientos llegará a la mente, (a tu mente), un pensamiento, una creencia
que podes desterrar ahora mismo, probalo.
Simple-mente trasforma ese
pensamiento, esa creencia en otra que te de paz, que te de luz, que te de
certeza, abundancia, estima.
¿Lo hiciste?
Elegí que pastilla tomar.
Elegí si ya no queres tomar
pastillas….
Y acompañame a cerrar este texto
poniendo nuevamente tu mente en paz.
Diciéndole a la vida a viva voz:
“Paz y
amor para mi y para todo el mundo”.
Gracias por estar.
Mi amor de Dios hacia vos.
Ale Flores
20 de Enero de 2018
La Merecida
Silla Azul
Espacio Sagrado
Altar de Fuego
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