lunes, 1 de febrero de 2010

El verdadero poder es Dios y habita en tu corazón

En el nivel de conciencia en el que estas, el sufrimiento es como lo que representa para vos una picadura de mosquito.

Es un mal pasajero y casi irrelevante.

Al igual que sucede con la picadura de un mosquito, el sufrimiento será más profundo y persistente en la medida que pienses en él. Mas daño te harás a vos en la medida que rasques esa picazón, ya que en ese caso podría sangrarte y hasta producirte una infección.

Si concentras tu mente en otra cosa la picazón desaparece.

Es solo cuestión de elegir en que fijar la mente.

La vida tiene situaciones inevitables, por lo tanto solo atravesalas, no te apegues a ninguna, ya que todo es pasajero, fija tu mente en un objetivo y co-crealo.

Crea la vida que te mereces, comprendiendo y aplicando las leyes espirituales y todo llegara a vos.

Comprende que el poder absoluto de Dios y la perfección de él en todo.

Dale gracias cada día por las vivencias vividas. Por las personas con las que interactuaste, pedile a Dios que les de luz. Sea cual sea la experiencia vivida siempre pedile a Dios luz para las personas que te acompañaron y para el lugar donde sucedió esa vivencia, ya que uno recibe lo que da.

No caigas en la tentación del odio. De la ira, ya que de ese modo le das poder al ego.

No te enfrentes ni creas que otros tienen poder sobre tu vida, ya que el poder es de Dios.

No fabriques falsos dioses ni inventes falsos demonios.

Solo acepta la perfección de la vida y da gracias por ello.

Acepta lo que te disgusta como una etapa, no te resistas ya que lo que resiste persiste. Aceptarlo o rechazalo, pero no le des poder. No basta solo con que decretes que no lo mereces, es necesario que comprendas que no tiene poder sobre tu vida. Que tu vida es eterna y solo el amor prevalece.

El poder es Dios, expande la luz de Dios y sentirás el poder. Sabrás que nunca estas solo por más que tu mente insista en que lo creas.

Sentirás que ya no estas sola porque creerás solo en el poder de Dios.

Sufre solo lo suficiente como para comprender que es una etapa, un proceso, parte de la perfección que habita en todo, observa, comprende y crece. Sabiendo que el verdadero poder es Dios y habita en tu corazón.


Gracias por estar.

Mi amor de Dios hacia vos.

Soy Reiki

Yo Soy

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