Para muchos fuiste un maestro.
Para algunos un excelente director de televisión.
Los amantes de la salsa bailaron tu “Quiero llenarte” elevando sus
vibraciones al cielo, y el mundo entero se emociona cuando escucha tu “Me
olvide de vivir”.
Para mi fuiste mi viejo, quien me enseñó el poder de los abrazos, quien
me mostró que tras cada caída hay que levantarse, quien me dió el ejemplo de no
bajar nunca los brazos y mantenerme de pie aun cuando me sienta derrotado.
Hoy en el sol te abrazo, en los recuerdos te encuentro, en mi calma te
escucho, y en mi corazón te siento libre del peso del cuerpo, sano como la
sanación, puro como la brisa fresca del mar que juntos disfrutamos, sabio como
un maestro, eterno como el amor en el que nos reconocimos y nos fundimos para
estar siempre unidos, más allá del tiempo, más allá del cuerpo. Más allá del
universo siempre serás mi viejo, quien me guió en el camino del trabajo, quien
me inspiró a mostrar mis sentimientos escribiéndolos. Quien me dió la vida y me
dió alimento para crecer sano, fuerte y formar una familia en la que tu querida
nieta con gran amor te recuerda y se emociona al pensar en vos.
Gracias viejo.
Te amo en la eternidad del amor.
Ale Flores
13 de Junio de 2020
No hay comentarios:
Publicar un comentario