De la crisis al aprendizaje

_Estas triste. ¿Qué te pasa?

_Como sabes!!!!! ?????????

_Yo pregunté primero.

_Invertí en un cambio para cambiar un poco mi vida y me fue muy mal...

Y ahora no se bien qué hacer...

_¿Qué invertiste?

¿Dinero?

¿Tiempo?

¿Ilusiones?

¿Por qué te fue mal?

¿Te duele tu apego?

Si queres cambiar tu vida en lugar de invertir, da. No pienses en el crecimiento a partir de una inversión, sino buscalo desde el crecimiento que tu participación otorga en el hecho del cual queres participar. ¿Se entiende?. Por ejemplo. “Quiero comprar un departamento para alquilar y tener un ingreso extra”, puede ser visto como, “quiero comprar un departamento para ofrecerle un techo digno a las personas que carezcan de la capacidad económica como para comprar uno, pero sus ingresos les permitan rentar uno donde ser felices”. En definitiva haces lo mismo, pero la intención es diferente.

Yo fui muy feliz cuando compré mi primer departamento y me costó mucho desapegarme de esa propiedad, ahí llegó Felicia cuando tenía apenas un mes y medio de vida. Ahí nació Julieta a quien le tuvimos que construir un dormitorio ya que la construcción original solo contaba con 2 ambientes. Pero lo entregué sabiendo que quien vendría tras nosotros tendría un crecimiento similar en su vida al que tuve yo, que entre esas paredes vería nacer a su primer hijo y la felicidad seguiría latiendo ahí tras nuestro paso. Fue así, tal cual lo soñé, el departamento cambio de manos y cada uno vivió en el su crecimiento, como sucede con las plantas que tras crecer mucho necesitan ser cambiadas de maceta para seguir creciendo.

Lo que dejaste para crecer sea dinero, tiempo o ilusiones, no es más que energía provista por el universo para que atravieses tu paso por la vida, lo que te hace sufrir es el apego, ya que crees que eso que “perdiste” no volverá, cuando entiendas que no es así, que aún te quedan experiencias por vivir, el universo te proveerá de lo necesario para el siguiente paso, el paso que estas por dar, que tal vez sea el paso que buscaste, pero del modo en el que el universo quiera que lo vivas, no como lo proyectaste desde tus ilusiones, (que no son más que la película que tu ego te mostró sobre cómo debería ser tu vida).

Quizás, solo quizás, el universo me haya mostrado tu tristeza para poder dedicarte estas palabras. Vos sabrás si eso es así, si lo que te digo resuena en tu corazón y hace “clic” en tu mente entenderás que fue por eso. De lo contrario seguirás creyendo en la casualidad, la casualidad que hoy te hace pensar que te fue mal, que no sabes que hacer y estar triste.

Ale Flores

3 de Abril de 2019