Despertá tu maestría y sé

¿Cuánto tiempo podes mantener tu mente en blanco sin que ningún pensamiento interfiera?.

¿Cuánto tempo podes estar absorbiendo solo los estímulos del lugar en el que estás por medio de tus sentidos?

Puede ser mirando un paisaje, viendo una película, leyendo un libro, escuchando música, meditando, o como sea, del modo que sea. Ese tiempo de silencio mental es sanación.

Ese tiempo en el que logras desconectar tu mente de los pensamientos que constantemente la atormentan y simple-mente logras ser, es un descanso profundo para que puedas pensar con claridad.

Y ya que la mente tiene el vicio de pensar y pensar, que nos cuesta tanto acallarla, que mejor que alimentarla con pensamientos que nos hagan bien, pasamientos de luz, de amor, de armonía, de prosperidad, de felicidad.

No sabemos cómo será este día ni el de mañana, pero si podemos elegir con que alimentarnos. El pensamiento es el principal alimento del cuerpo humano, ya que lo absorbemos todo el tiempo, no solo al masticar.

Guarda silencio.

Dedica un instante para permitirles a tus sentidos conectarse con el entorno que te rodea y absorber lo que debe llegar a vos.

Pone tu intención en elevar las vibraciones del espacio que ocupas, visualiza ondas de luz que salen de tu corazón proyectándose en todas las direcciones.

Absorbe los estímulos y devolvelos al universo transformados en luz, en amor, en paz mediante las vibraciones que tu mente le ordena irradiar a tu corazón hasta que mente y corazón sean uno y solo sientas la energía que realmente sos.

Eso es alquimia.

Dando es como se recibe, lo que irradias es lo que recibirás.

Continua con este proceso, repetilo varias veces durante este día y cada día de esta semana, de este mes, de este año.

Hacé que se haga un habito en vos en cada espacio que ocupes, tu casa, tu trabajo, tu curso, en el transporte que habitualmente utilizas, en tus relaciones.

Que la técnica se convierta en habito y el habito te conduzca a tu propia maestría.

Algún día le enseñaras a alguien esta técnica y en tus palabras estará la vibración que plasmo ahora en este texto, como están aquí las de todos mis maestros de esta y otras vidas.

Somos uno.

Despertá tu maestría y sé.

Ale Flores

4 de Marzo de 2018

La Merecida

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