La muerte es una interpretación, lo que creemos muerto se encuentra en un
estado diferente al nuestro, ya que en realidad la muerte no existe, es solo un
cambio de estado.
Cuando aceptamos el cambio de
estado aceptamos la muerte, y es más fácil superar el dolor que deja la
ausencia física.
Las creencias dominan nuestras
mentes, creemos lo que creamos, y creamos lo que creemos. Cuando aceptamos que
la energía nunca muere nos unimos en ella con todos los seres vivos de este y
de otros planos.
Cuando el corazón siente que la
unión se estableció, ella se ha establecido y desde nuestra mente sostenemos el
estado el tiempo que decidamos sostenerlo.
Es usar el amor como un puente.
Es cruzar el amor por un puente.
Hoy cruzo el amor por el puente
que establezco desde mi corazón para abrazar a mi viejo que partió de este
plano hace 6 años, con quien a esta hora hace 6 años me encontraba por última
vez con su presencia física en la que con mi propia mano cerré sus ojos por
siempre para dejarlo descansar en paz.
Hoy establezco esta unión como
cada día, con más intensidad tal vez, con mas predisposición de mi mente, pero
cruzo el mismo puente con el amor que irradio desde mi corazón, que atraviesa
espacio y tiempo a la velocidad de la luz para unirse a la pureza de la energía
en la que ahora habita mi viejo, donde su ser y el mío son uno, donde somos
uno.
Donde no existe la muerte.
Donde solo hay amor.
Ale Flores
10 de Octubre de 2016
La Merecida
Silla Azul
Espacio Sagrado
Altar de Fuego
Podes escuchar este texto que fue leído el 27 de Diciembre de 2016 por Vero Merigo en Pop Radio, en el siguiente vídeo:
También lo encontras en este enlace:
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