¿Cuántas veces le pones mascaras
a lo que sentís?
¿Cuántas veces nos negamos por
el “qué dirán”?
¿Cuántas veces el orden social,
la estructura mental se impone a nuestro orden interno, a lo que sentimos?
¿Cuántas veces nos cuestionamos
si sentimos lo que sentimos o si es un estimulo mental?
¿Cuántas veces somos injustos
por no permitirnos ser justos con nosotros mismos?
Tenemos tan impuestos los
prejuicios sociales que nos cuesta dejarlos, y aunque seamos consientes de
ellos, siempre hay uno que no vemos, y es el que nos mantiene prejuiciosos.
Hasta en nuestros actos más
puros puede haber prejuicios.
Muchos maestros de la verdad
fueron perseguidos por prejuicios.
¿Cuántas veces no le damos
tiempo al otro para que nos muestre su divinidad?
Hasta el mosquito tiene una
inteligencia superior que lo domina, y si nos dirigimos a ella desde nuestro
ser y le pide a esa inteligencia que los mosquitos no nos molesten, ellos no
nos molestaran.
El orden a veces esta en el
desorden.
Los prejuicios muchas veces nos
muestran los matices entre lo que creemos bueno y lo que creemos que no lo es,
matices que nos dan esas claves para entender el porqué de nuestros prejuicios.
Los prejuicios son claves para
entender lo que nos pasa. Si los analizamos, los prejuicios son una gran
herramienta. Pero si somos presos de ellos, nos encarcelan y nos mantienen en
calabozos.
El prejuicio parte de la mente,
y la mente es una herramienta para llegar a Dios.
Observa tus prejuicios.
Observa lo que crees y lo que no
crees.
Preguntate porque crees en lo
que crees, y porque no crees en lo que no crees.
Veras que las diferencias son
tan sutiles como las coincidencias, ya que siempre se trata de lo que vos
crees, y lo que vos no crees.
Hasta en mi tenes una creencia
que no sabes si es real.
Hasta en vos tenes una creencia
que no sabes si es real.
¿Cuál es la clave para saber?
La clave es sentir.
Sentir en el corazón, no en la
mente.
Entender que sentimientos nos
despiertan amor, paz, luz y que sentimientos son del ego.
Si son físicos o espirituales, y
una vez que sabemos, hacer cada uno lo que siente hacer.
El libre albedrio radica en
elegir desde que lado accionamos, si del lado de las emociones terrenales, o
del lado de las emociones espirituales.
Cada situación es única, aunque
en el fondo represente lo mismo.
En muchas situaciones desde el
cuerpo llegamos al espíritu, en otras desde el espíritu llegamos al cuerpo.
Somos seres espirituales
viviendo una experiencia terrenal.
Si no vivimos las experiencias
terrenales nuestro espíritu no crece. Se crece con la experiencia, se construye
con el conocimiento.
Se vive con la verdad.
Se alimenta con el amor.
Ale Flores
9 de Marzo de 2014
La Merecida
Silla Azul
Espacio Sagrado
Altar de Fuego
Gracias
por estar.
Mi amor
de Dios hacia vos.
"Lo que te envío
acá no son palabras, es vibración, si centras tu atención en ella la sentirás,
te envío luz, luz y amor."
“La vida es un regalo,
el envoltorio la mente. Sólo hay que abrirla para disfrutar el presente.”
Solo por hoy no te enojes.
Solo por hoy no te preocupes.
Solo por hoy se agradecido y humilde.
Solo por hoy se honesto.
Solo por hoy se bondadoso con los demás.
"Si lo que hago además de a mi le
sirve a alguien, mi misión está en marcha."
"Si Logras Unir Tu Mente A Tu Corazón Serás Una
Buena Persona, Si Logras Unir Tu Corazón A Tu Mente Serás Un Iluminado."
"Quien
teniendo la posibilidad de recibirlo, no se abre para acepta el amor que habita
en vos, se está perdiendo lo más maravilloso de la vida."
Soy Reiki
Yo Soy
Si
Dios fue capaz de crear una semilla que puede convertirse en árbol y dar
frutos,
¿te imaginas todo lo que podes hacer vos?
Dios obra a través tuyo.
Ale Flores
El sentir no engaña, la mente o predisposiciones mentales o sociales si pueden llegar a engañar.
ResponderEliminarSi nos hemos metido mucho en el personaje que hemos creado o han creado nuestros padres o profesores en nosotros seremos algo artificial, la mascara. Por eso hay que ser muy cuidadosos con la enseñanza y ejemplos que damos a los mejores de 6 años. En los primeros 7 años se forjan muchisimas predisposiciones sociales que posiblemente no tienen nada que ver con nuestra esencia creando seres artificiales no reales. La realidad esta en tu interior no en la estructura social o en predisposiciones para intentar llegar a un perfeccionismo que hemos adoptado de fuentes externas no internas.
Podemos sentir con mayor sensibilidad si nos cuidamos, si nos atendemos, si nos respetamos.
Si conservamos nuestra energía kundalini la paz interna ayuda, porque manteniendo esta energia al no eyacular o desperdiciar nuestra agua alquimica, esencia creadora, nos inunda una paz interna, el sistema nervioso ya no necesita esa droga, ese efecto de relajación que produce la eyaculación. Pero nos volvemos adictos a esta sensación y cuanto mas eyaculamos mas vamos perdiendo de nosotros mismos. Y mas bruscos somos. Ayuda mucho en las relaciones al igual que perjudica un sexo sin conocimiento. Sin conciencia.
Pensar, hacer y sentir de forma coherente es otra llave para que las cosas vaya bien. Concordando esto vamos mejorando.