lunes, 14 de septiembre de 2009

La luna y el Sol

Por la rotación de la tierra y la translación de la luna los humanos solo vemos una cara de la ella.

El sol, por su parte, gracias a su rotación y a la de la tierra nos muestra todas sus caras.

La luna es la representación de la materia.

El sol es la representación del espíritu.

Al sol lo vemos durante el día y aunque no lo veamos, siempre está.

La luna refleja la luz del sol, ya que carece de luz propia. La vemos por las noches, aunque a veces también la podemos ver de día. Además va cambiando de forma y tamaño para nuestra apreciación desde la tierra.

Al sol no lo vemos por las noches, su forma siempre es la misma. Impone su presencia.

Ambos son muy precisos.

Lo que vemos, lo que observamos, lo que aceptamos puede tener una visión terrenal o una visión espiritual y esa observación coincide con las características solares o lunares.

¿Como queres que sean tus decisiones, terrenales o espirituales?

No coseches tesoros en la tierra, donde el ladrón asecha y la humedad corroe.

Cosechalos en el cielo, donde el ladrón no habita y donde la polilla no llega.

Si obras desde tu espíritu, en forma amorosa, desinteresada, compasiva, pacifica, silenciosa, precisa, todo es y será perfecto.

Si obras desde tu parte terrenal nunca podrás ver las dos caras, a veces incluso ni siquiera verás una cara o puede que esa visualización sea parcial.

Quizás la veas de día y te llamará la atención, generalmente la veras de noche y tus decisiones estarán basamentadas en tus intereses terrenales.

Si obras desde tu ser espiritual tus obras se verán aunque vos ya no estés, tu presencia dará calor y abrigo.

Aunque no te puedan ver sentirán tu presencia.

Sentirán tu energía. Que será de amor.

Que será de paz.

Que será de Luz.




Gracias por estar.

Mi amor de Dios hacia vos.

Soy Reiki

Yo Soy

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